Que estamos es un periodo de alta incertidumbre en plena pandemia es ya algo que tenemos claro…Pero ¿Qué es la incertidumbre? es la falta de certeza, de seguridad o claridad. Esto no es ni bueno ni malo, si no fuera porque esta inseguridad en ocasiones viene acompañada de sentimientos de miedo, y ésta, que es una emoción totalmente normal, si no la gestionamos, nos puede llevar al pánico o a estados de ansiedad, que nos paralizan o nos descontrolan por completo, y ahí hay sufrimiento.

¿Cómo podemos gestionar mejor la incertidumbre?

La vida ya era incierta antes de 2020. Y de hecho, lo sabíamos. A todos nos han pasado cosas que nos han cambiado el día, o la vida, de una manera que no esperábamos. Convivimos constantemente con la incertidumbre, sólo que no reparamos en ella la mayor parte del tiempo.  Tendemos a encontrar seguridad en nuestras rutinas, en nuestros entornos conocidos, en nuestra planificación…en todo aquello que nos ayuda a organizar la vida. Y está bien, es una manera de preservar nuestra tranquilidad, de controlar en cierta medida la vida para llevar a cabo nuestro día a día.

Y en realidad, esto que hacemos de agarrarnos a lo conocido, es precisamente una de las cosas que podemos hacer para manejar la incertidumbre y evitar que nos lleve a estados de ansiedad, de miedo por lo que pueda venir, por lo desconocido. Es decir, dentro de la incertidumbre imperante, mantener ciertas rutinas o establecer nuevas, organizar el tiempo y planificar tareas, gestionar los recursos que tenemos, mantener un orden para que el caos no nos desborde.

Pero…¿Qué pasa cuando la incertidumbre es muy alta o la percibimos así? Estamos expuestos a mucha información, en la tv, en las redes… No sabemos qué va a pasar con la pandemia, con la economía, con nuestros trabajos, con los niños en el cole, con el país, con el mundo…tenemos mucha información, exceso de hecho, y con la mayor parte de esa información, no mejoramos la sensación negativa que nos produce la incertidumbre, de hecho, la agrava. No sobreexponerse a la información para no elevar la ansiedad puede ayudar.

De la mano de la idea anterior, viene esta…Es importante poner el foco en aquello que nos está afectando a nosotros. Es decir…con tanta información, nos preocupan cosas que, aunque nos afecten directa o indirectamente, están fuera de nuestro alcance y a veces nos desbordan (si existe ya una vacuna, las decisiones políticas, las crisis económicas, etc), agravando nuestro estado. FOCO. Es importante enfocarse en primer lugar en lo que tiene impacto en mi vida. Y a partir de ahí actuar, buscar soluciones, modos de mejorar aquello que ahora me preocupa.

¿Nos preocupa la situación en nuestro puesto de trabajo o de nuestra empresa? Hablemos con nuestros responsables para aclarar dudas, para conocer mejor la situación real así como los objetivos a corto, medio y largo plazo. ¿Y si somos los responsables? Podemos ser generosos y compartir información con nuestros equipos, aportar una mayor transparencia. No sólo ayudará a nuestros colaboradores a valorar su situación personal de manera más precisa, también la situación de la organización y las medidas tomadas acordes a los tiempos. Comunicación, por favor.

Pero para mi, lo más importante a tener en cuenta para gestionar la incertidumbre es recordar que tenemos de manera iinnata la capacidad de adaptación. El ser humano se ha adaptado a los cambios de todo tipo a lo largo de su historia y con la adaptación, su evolución. Hablaba de esto en este post de hace unas semanas https://www.mariahernandezabos.es/blog/post/adaptacion-todo-el-rato y es que se trata de adaptarnos. Tenemos las herramientas para hacerlo, y si nos falta la fuerza, o la dirección, podemos pedir ayuda.

Así que resumiendo:

• Establecer rutinas, hábitos, hacernos cargo de nuestro día a día.
• No sobreexponernos a la información.
• Poner el foco en aquellas cosas que dependen de nosotros.
• Hablar con personas que nos puedan dar más claridad. Y si somos nosotros los que podemos aportar luz, no dudar en hacerlo.
• Tener presente que somos capaces de adaptarnos, lo hacemos constantemente y seguiremos haciéndolo.